En esta etapa, los más chiquitos (1 a 4 años) desarrollan, a través del juego,
sus habilidades motoras, intelectuales y sociales.
Se divierten y aprenden. La clave es el juego en movimiento.
Empiezan a sociabilizar y compartir. Exploran al aire libre y en el agua.
La finalidad de este programa es crear el hábito del movimiento temprano, promoviendo la sociabilización, la creatividad, la autonomía y la incorporación de hábitos saludables.